TIEMPOS DE OSEO.

La mañana se vuelve tensa y agobiante en mis pensamientos, en ellos sé a desatado una guerra con ideas de agonía letal, mi amor pasional y guajiro se a tornado sangriento desde que deje entrar el aire sucio y devastador a mi mente.

la última vez que ellos tuvieron paz fue el día que te conocí, con una carita angelical que hoy en día se volvió letal a mi alma, por triste partida y alejamiento de mi vida por razones de inmadurez.

aquí estoy en medio de la guerra mental que sofoca mi espíritu por tan devastadores pensamientos sobre ti, tu vida, tu amor guardado que no llegue a conocer, las caricias llenas de amor que serán en otro corazón y cuerpo, y que despacio lleva a mis células, tras células de mi mente en caer abatidas, que es la peor guerra en siglos de una mente al olvido.

al día mi mente lleva perdidas letales de vida, suspiros al aire que mueven montañas en la galaxia de tanta fe en pérdidas, que por segundos pide ayuda a otros campos que no son afectados por pensamientos que el aire trajo, y a lo lejano se distingue una luz de esperanza, el apoyo de otros campos que no son afectados de la guerra mental, el amor propio llega, sin medida al rescate, y tu espíritu mío, porque no sales al rescate pronto, que necesita ayuda mi mente que la guerra es devastadora y voy perdiendo células por el amor de un corazón inexplorado. 

cuál funeral es postergado por tantas batallas, y las perdidas en el campo son enumeradas se levantan una y otra célula abatida por amor, cada célula de amor, lleva su nombre, su edad, su tiempo de vida, recuerdos vividos con pasión, sobre todo al momento de su muerte, llevo en si, el nombre de su contrincante, que murió diciendo, no puedo y pude hacer nada por el amor de ella, solo me deje matar por amor a ella, ya que en esta guerra no se puede afectar a una célula contrincante, por que es su amor del momento en este mundo.  -mic-