TRAYECTOS DE VIDA.

                                    

La vida, es este tipo de camino que nadie quiere recorrer, es un camino angosto que tiene ramas a su alrededor, espinas, arboles en medio del camino, rocas y belleza, que para poder cruzar, tenemos la costumbre de rodear o buscar otra vereda existente y mas corta, pero cuando decides iniciar y mirar el camino, junto a esos árboles, espina de otras ramas que lastiman, el corazón, alma y la piel sin medida y profundidad.

¿que es la vida, sin las piedras?

 es algo que la mayoría criticamos, pateamos o pintamos; esa roca o piedra en el camino, que no levantamos y no observamos,  que nos quiere enseñar, pero solo te lleva a cometer discrepancias por correr rápido, sin ver, si mas adelante encontraras mas, sin aprender de la que nos encontramos primero.

un día me invitaron a recorrer un parque en bicicleta de montaña, mi sorpresa mas grande fue que la entrada se miraba prometedor el recorrido, un espacio amplio para recorrer o dar vuelta, pero inicie el recorrido sin mas preámbulo, ya entrando, a la vereda,  de incio se miraba estupenda, pasando unos doscientos metros empece a ver piedras de diferentes tamaños, formas, textura, y aun mas imponentes, con grandes puntas afiladas; en las orillas del sendero, las ramas, salían al encuentro, conforme iba avanzando, ellas me tocaban con sus hojas sucias, con ligeras puntas, no sabias si cuidarme de las ramas o de las piedras.

De repente encuentro un árbol en medio del camino en una curva muy cerrada, no sabia si frenar de golpe o estrellarme con las piedras, mire que solo pasaba en una pequeña grieta, la llanta de la bicicleta, ya que era tan estrecho el sendero y pense rapido, era impactarme con ese árbol, o realizar nueva vereda, hacia otro lugar del camino, rodeando la curva y arbol, era la decisión mas vital en ese momento de mi vida, llevarme el gran golpe, por avanzar, sin haber tomados las medida de cautela apropiadas, de repente, anvanzo por otro lado, con el freno delantero puesto, la bicicleta se levanto de atrás, con todo mi peso impactándome, al lado derecho donde las ramas con sus hojas sucias, ramas puntiagudas y cortantes, poco prometedoras amortiguarían mi caída, me impacte con unos matorrales que al parecer esperaban mi encuentro ya que estaban tan maltratadas, ya que analizando ellas habías sido impactadas varias veces en su pasado.

me levante quejándome del impacto, haciendo un argumento de quien carajos, había hecho el camino y no analizo de los accidentes que ocacionaria ese árbol, recordé que ese árbol era parte del camino que tenia que recorrer, sin decir el árbol ningún argumento de su parte; ya que el no pidió nacer y crecer en ese lugar, el aire empezaba a estar caliente, demasiada humedad en el ambiente, mosquitos y todavía no llevaba ni cuatrocientos metros de la entrada. 

ahora me tocaba tomar una decisión continuar o desertar, me puse a analizar con mas calma de que me faltaba recorrer seis kilómetros  para salir de ese lugar tan poco inusual, para una persona como yo, me acorde en ese momento de mi vida fuera de ese camino, fue similar esa caída en mi infancia que me levantaba y continuaba, sacudiéndome la tierra, pero aquí era diferente la caída mas fuerte y dolorosa por mas que lo viera de otra forma, tome la decisión de avanzar con mas cautela y sin correr de mas.

según avanzaba, mas era el camino Pedroso, ya había cuestionado mi decisión de haber avanzado, las piedras que jamás  había visto en mi vida, llenas de filos y grandes, donde la llanta de la bicicleta pasaban porque estaban hechas para ese tipo de camino, mis piernas por mas despacio que pedaleaba, pensé que menos fuerte seria el maltrato o impacto con ellas, recorrí no recuerdo cuanto, en eso una pendiente que al final había una curva que de lejos se miraba impactos pasados, fui descendiendo la velocidad lentamente, sin bajar de la bicicleta, tanto era mi miedo que me arriesgue para aprender a bajar de algo peligroso a velocidad considerada, el movimiento con vibracion de mi cuerpo era notorio, por todo el camino Pedroso, cansado, sudado parte de los antebrazos con ligeros aruños de los matorrales, las piernas, llena de polvo del camino, todo eso me paso en lapso de segundo en la mente, bajando la pendiente hacia la curva, llegando a ella mi sorpresa, encontrar, cosas de personas que dejaron, quiero pensar el logro de bajar esa pendiente sin dañarse o de sus impactos haciendo recordatorio con un objeto.

mi cuerpo cansado de tanto recorrido, zangoloteado, sentía la cabeza que me la habían removido y aun así seguía sintiendo vibraciones en mi cuerpo, del camino Pedroso.

el tiempo de salir de dicho sendero ya era, y el mapa del trayecto lo tenia en mi manos y era exacto, pero para mi era que sigue de este camino, será regresar por el mismo o continuar por otro, mi pensamiento era continuar otro camino a la salida, decidi continuar con todo lo que viniera y prepararme mentalmente en ese momento

el mapa tenia señalamientos  y lo que continuaba era, vereda de los militares  y vereda del mar, opte por vereda del mar, ya que analice detalladamente, si dice militar, ah de ser dura la trayectoria por ser militar el entrenamiento, y opte por tomar la vereda del mar, monte de nuevo la bicicleta y empece a recorrer la vereda que me llevaria a la vereda del mar, el camino era pedroso, la vibracion en mi cuepro crecia, mis sentidos sentia que se movian sin piedad, la humedad era imprecionante, aunque el sol no daba mucho, por los grandes arboles que habia, los mosquitos parecia que estaban en guerra conmigo, aunque iba a velocidad lenta se pegaban a mi cuerpo, no les importaba, si yo estaba sufriendo, y el paisaje era comprometedor solo levantaba fracciones de segundos la mirada, ya que no queria quitar la vista del camino pedroso, de repente logro ver de lejos, el color verde turqueza, exclame ¡el mar!, pero; oh mi sorpresa, el encontrarme que tenia que recorrer esa vereda ah orilla del mar, la arena era un factor que causaria mi agotamiento al por mayor, había cuestionado otra vez mi decisión, opte por regresarme, pero me detuve y analice la otra vereda en lapso de treinta segundos, analice la vereda de los militares y en la que me encontraba, tome valor y segui, por la orilla del mar y su arena de color blanca, como la sal, el sol apabullante, la briza del mar refrescando mi cuerpo, pegandose a mi cuerpo el salitre que misma, briza del mar traia, pero mi cuerpo agotado mas del ochenta porciento, no podía mas con ese trayecto, la llanta se enterraba en la arena, no lograba avanzar mucho y eran de playa como cien metros o menos.

logrando pasar ese trayecto, hasta una sombra de unos matorrale, baje de la bicicleta tirándola sin piedad, y exhausto de mi cuerpo que no podía mas queriendo hacer una llamada para que fueran por mi hasta ese punto para salir caminando, me acosté en arena fresca, y realice un comentaria al aire ¡y page la entrada para maltratar mi cuerpo!  esto es demaciado  extremoso y nada de aprendizaje, nada de tranquilidad es realizar esta actividad al aire, estuve acostado como veinte minutos, que al ponerme de pie mis piernas temblaban del cancancio y dolor, mire el mar y contemple sus olas, que eran muy fuertes, pense en voz alta, ya que estoy aquí me metere al mar a refrescarme, me adentre en el mar, las piedras muy filosas era ya que, no era playa, si no un acantilado de rocas, pero el agua se miraba comprometedor y limpio, estuve como quince minutos en el mar, sali del agua y espere secarme un rato, para ponerme la ropa, ya que solo me quede en paños menores. 

no sabia que hacer mire el mapa de nuevo, no entendia muy bien a donde me dirijia ahora, monte la bicicleta de nuevo y volví al camino para ver que me esperaba mas adelante, pero pedaleando despacio, ya que mi cuerpo todavia seguia agotado, pero bebia lo necesario para hidratarme, llegando, a dos camino tome a la izquierda, la vereda decia numero nueve, sin mirar el mapa avance, cuando empecé a avanzar note el camino con piedras y saltos de grado avanzado, rampas con grado, que tenia que pasar, logre pasar todo esos abotaculos sin saber donde estaba, solo pense,  era lo que seguia y  que era todo este camino o era una broma, pasando todo con cautela a mas baja velocidad, quede asustado, llegando al final de la vereda decia al punto diez, en esa brecha me baje y rápido tome el mapa y busque el nombre de la ruta nueve y diez.

mi sorpresa fue que había tomado la vereda de los militares solo empecé a reírme como loco, no de coraje, si no de ignorante y terco que fui, al no revisar el mapa, pero en el fondo me sentía extraño, como si algun logro que habia evadido, acaba de hacerlo, por haber tomado equivocadamente esa ruta, ya que había hecho algo peligroso con cautela y sin correr tanto, así que solo guarde el mapa y avance todo el final del camino era Pedroso ramas, curvas bajadas, subirse en rocas con la bicicleta y en velocidad de repente una subida para mi era como unas montaña las rocas, tome impulso y en medio de las roca, había banco de arena de playa, que al instante se quedo la llanta delantera atastacada, fue un paro total de la bicicleta y mi cuerpo resintió ese alto total, que me fui de lado derecho recargándome en un árbol que era una barita, como  el grueso de mi brazo ese pequeño arbol, pudo soportar todo el peso dejándome a la mitad, yo me quede sin aliento, y me dije, aquí ya dejare parte de  mi, luego mis pensamientos se inundaron de negativismo, ya me quebrare la dentadura, me fracturare un hueso, pensé de todo, y en eso sostuve bien fuerte mis piernas cargando mi peso y de la bicicleta, sobre una roca lisa, y el brazo derecho tome el delgado árbol, que subí lentamente a pie, sin bajarme de la bicicleta, ya que no se podía bajar por lo estrecho que era esa subida, era de un metro de altura, llegando a la cima, mire hacia atrás y dije, no me hice nada y logre subir con ligeros aruños, llegando a la vereda doce que me conectaría con el camino dos, mire que el camino era el mas hermoso después de todo lo que había atrás y dije porque no todo el camino lo hicieron así, este trayecto, esta padre, amplio y confortable, llenos de arboles dando una sombra estupenda, saliendo del camino dos, para tomar vereda del manglar me confundí, tome la vereda del venado y empecé a ponerme nervioso, argumentando, que camino tomar; el mapa ya no lo miraba alentador, ya que el camino era diferente y tome la vereda del venado, llegando a el numero tres, dije, no era por aquí, confundido de todo, cansado y angustiado, regrese al camino dos, y tome vereda del manglar, recorriendo un manglar, no me fije del paisaje, si no de salir de ese lugar pero fracciones de segundos levantaba la mirada y se miraba genial, el camino que estaba recorriendo, con grandes, frondosos y viejos arboles, que imponian al verlos.

saliendo de  la vereda el manglar decía, META me llene de alegría y mi cuerpo, sintió esa energía de, saldré de esto y jamás regresare a ser maltratado por un camino con dificultades a recorrer, llegando a la salida solo deja la bicicleta y me acosté en el piso,  por fin un lugar sin tantas piedras y agradeciendo, el encargado del lugar, sonriendo y feliz de que habia llegado, argumentándole ¿buen trayecto el que acabas de pasar verdad? respondi sin sonreir, que en mi vida habia recorrido algo tan dificultuoso y sin tener experiencia, y que jamás volveria a recorrer y pagar para hacerlo!  el solo empezó a reírse. 

amado lector, la realidad de los caminos son inciertos, que sin dirección, no sabremos como llegar, a donde ir, y como cruzar, este tipo de camino u otros que hayamos decidido recorrer; mi vida se torno diferente a raíz de ese momento, ya que muchos tenemos ese tipo de caminos, por gusto y decisión, pero lo llevamos sin haber leído instrucciones antes de tomar cualquier decisión, algunos se preguntaran que tipo de instructivo tenemos los humanos para no tomar decisiones erróneas. 

podre argumentar muchas cosas al respeto pero quiero que nosotros mismo nos hagamos conclusiones del porque eso, esto, y aquello, ya que pensaremos que no hago mal a nadie; y nos daremos cuentas, que hay cosas en nosotros que tenemos que cambiar y actuar pronto

 solo puedo decir algo simple, en esta aventura que yo decidí y fue mi gusto, supe de que estoy hecho en este tipo de trayectos, pero eso no quiere decir que no me equivoque en tomas de dicisiones, ya que aun sigo luchando con mis egos, errores y tomas de decisiones, pero ahora lo hago diferente ya que si leo las instrucciones sabré que pasara mas adelante y confiar en el autor del libro tan controversial y mas vendido en la historia de la humanidad, ya que son reglas y direcciones, la Biblia.          -mic-